17/5/13

BARRIO GUADALQUIVIR: SE NOS APAGÓ LA LUZ


Quisiera sumarme al malestar generalizado que estamos viviendo en el barrio Guadalquivir debido a la escasez, o más bien inexistencia, de unas condiciones mínimas para vivir saludablemente.
Me siento realmente indignada, decepcionada, abrumada e incluso asustada. Soy totalmente consciente de la situación que estamos viviendo. Entiendo que todos debemos "apretarnos el cinturón". Pero de ahí a vivir en unas condiciones que rozan la insalubridad hay una enorme distancia.
Si llego de día a casa, gracias a la luz solar, puedo esquivar la basura, desechos de animales o cristales, pero la cosa se complica cuando llego de noche. Yo no pido calidades de lujo, pero ¿de verdad considera el Ayuntamiento que un mínimo alumbrado es un lujo o mucho pedir?
Me siento avergonzada cuando familiares o amigos vienen a visitarme, y tengo que advertirles que no olviden traer una linterna, porque si no no verán ni por dónde andan. Hay zonas de Córdoba donde no reside nadie, donde aún siendo de noche casi es conveniente usar gafas de sol para no ser deslumbrados por la excesiva iluminación que poseen, y al llegar a casa, me encuentro que no es que se vea poco, sino que es imposible ver algo.
No menos sorprendente es el estado del descampado situado entre mi manzana y la ocho. No pido que instalen la mejor pista de padel de la ciudad, pero creo que, al menos, nos merecemos por nuestra propia seguridad e higiene que poden la zona.
Por otro lado, me llama la atención la escasa o nula presencia policial por sus calles. Trabajo en Cruz Conde y no hay momento del día en el que no haya al menos dos patrullas dando vueltas. Ni mucho menos recrimino esto, pero sí pienso que deberían estar más repartidas.
No es justo meter a todo el mundo en un mismo saco. Vivimos personas trabajadoras, con una gran educación y civismo que nos merecemos poder vivir con unas mínimas condiciones de vida saludables. Además, pago todos mis impuestos, por tanto, tampoco considero que sea un regalo pedir tener farolas.
Agradezco profundamente el esfuerzo de la Asociación de Vecinos de nuestro barrio que realizan por conseguir todo esto que he detallado y muchísimas acciones más.
Espero de verdad que nos escuchen de una vez, que el Ayuntamiento sea consciente de que vivimos personas con los mismos derechos que el resto de la ciudad, y que dejando el barrio de lado, jamás conseguiremos que la cosa cambie.
Elisa Calvo Serrano
PUBLICADO EN EL DIARIO DE CÓRDOBA EL 17/05/13

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